¿Qué es Sexólicos Anónimos?
Sexólicos Anónimos es una comunidad de hombres y mujeres que comparten su mutua experiencia, fortaleza y esperanza para resolver su problema común y ayudar a otros a recuperarse. El único requisito para ser miembro es el deseo de liberarse de la lujuria y alcanzar la sobriedad sexual. Para ser miembro de SA no se pagan honorarios ni cuotas; nos mantenemos con nuestras propias aportaciones. SA no está vinculada a ninguna secta, confesión religiosa, partido político, organización o institución alguna; no desea intervenir en controversias; no respalda ni se opone a ninguna causa. Nuestro objetivo primordial es mantenernos sexualmente sobrios y ayudar a otros sexólicos a alcanzar la sobriedad sexual*.
Sexólicos Anónimos es un programa de recuperación basado en los principios de Alcohólicos Anónimos y ha recibido el permiso de AA para usar los Doce Pasos y las Doce Tradiciones en 1979.
*Adapted with permission from The AA Grapevine, Inc. SA adaptation © 1982, 1989, 2001 SA Literature. Reprinted with permission of SA Literature
Declaración de Principios de Sexólicos Anónimos
Como definimos la sobriedad
Tenemos una solución. No pretendemos que sirva para todos, pero a nosotros nos resulta muy útil. Si te identificas con nosotros y crees que tu problema puede ser semejante, pasaremos a hablarte de nuestra solución. (Sexólicos Anónimos, pág. 2)
Al definir la sobriedad no hablamos en nombre de aquellos que no pertenecen a SA. Tan sólo podemos hablar en el nuestro. Así, para el sexólico casado, la sobriedad sexual consiste en abstenerse de todo acto sexual consigo mismo o con otras personas, exceptuando a su cónyuge. En la definición de sobriedad de SA el término “cónyuge” se refiere a la pareja en un matrimonio entre un hombre y una mujer. Para el soltero, en la abstinencia de cualquier tipo de actividad sexual. Y para todos nosotros, solteros o casados, la sobriedad sexual incluye también la victoria progresiva sobre la lujuria. (Sexólicos Anónimos, pág. 193-194)
Declaración de Principios aprobada por la Asamblea General de Delegados en febrero de 2010
El único requisito para ser miembro de SA es el deseo de liberarse de la lujuria y de alcanzar la sobriedad sexual, según la definición de sobriedad de SA. Cuando dos o más sexólicos se reúnen para alcanzar la sobriedad de SA, según la definición de sobriedad de SA, pueden llamarse un grupo de SA.
Las reuniones que no se adhieren ni siguen la declaración de sobriedad de Sexólicos Anónimos, tal como se establece en la anterior Declaración de Principios adoptada por la Asamblea General de Delegados en 2010, no son reuniones de SA y no pueden llamarse reuniones de SA.
Adenda a la Declaración de Principios aprobada por la Asamblea General de Delegados el 8 de julio de 2016.
Vídeos informativos de SA
SA una solución para adictos a la pornografía y al sexo
Traducción: Tienes un problema con la pornografía, ha llegado el sexo a ser un hábito fuera de control. Este comportamiento puede afectar a trabajo, familia, matrimonio, tu vida. ¿Por qué esperar a que el ascensor llegue al fondo?. Si consideras que puedes tener esta adicción, contáctanos. Somos Sexólicos Anónimos y tenemos una solución que funciona.
SA una solución para mujeres adictas al sexo
Respuesta a algunas preguntas con las que suelen llegar las personas a SA
Hablamos por nosotros mismos. La naturaleza especializada de SA puede entenderse mejor en términos de lo que llamamos sexólico. Los sexólicos se han situado ellos mismos fuera del contexto de lo que llamamos lo bueno y lo malo. Han perdido el control y ya no tienen el poder de elegir. Ya no pueden detenerse. La lujuria se ha convertido en una adicción. Nuestra situación es como la de los alcohólicos que ya no pueden tolerar el alcohol y deben dejar de beber por completo, pero su relación de dependencia es tan grande que no pueden lograrlo.
Así sucede con los sexólicos o borrachos del sexo, que no pueden tolerar la lujuria pero al mismo tiempo no pueden prescindir de ella. Así, para los sexólicos, cualquier forma de relación sexual consigo mismo o con personas distintas a su cónyuge es progresivamente adictiva y destructiva. También somos conscientes de que la lujuria es la fuerza impulsora de nuestros comportamientos sexuales y que la verdadera sobriedad incluye la victoria progresiva sobre la misma. Llegamos a estas conclusiones a través de nuestras experiencias y del proceso de recuperación; no tenemos otra opción. Pero reconocemos que aceptar esta realidad es la clave para una libertad feliz y gozosa que no podríamos conocer de ninguna otra forma.
Esto debiera desanimar a muchos de los que nos visitan que admiten ser víctimas de la obsesión y compulsión sexual, pero que lo que en el fondo quieren es controlarla y disfrutarla, del mismo modo que a los alcohólicos les gustaría recuperar el control y disfrutar la bebida. Hasta que llegamos a la desesperación, hasta que quisimos parar de verdad pero vimos que no éramos capaces, no pudimos tomar en serio este programa de recuperación. SA es para los que no tienen más opción que parar y es su propio interés personal el que debe convencerles de ello.
© 1989, 2001 SA Literature. Reprinted with permission of SA Literature.
Has de llegar a esta conclusión por ti mismo. Reconocer que somos impotentes es lo que se llama “trabajar el Primer Paso”. Como afirma nuestro Primer Paso “Admitimos que éramos impotentes sobre la lujuria—que nuestras vidas se habían vuelto ingobernables—”.
Lleva tiempo—y mucho sufrimiento—admitir que la lujuria nos ha derrotado. Más tarde o más temprano decimos: “Me rindo”, “necesito ayuda”, “solo no puedo”, o algo semejante. Cada una de estas frases es una admisión de impotencia.
Es por eso por lo que no funciona cuando tratamos de alcanzar la sobriedad por otra persona como un familiar o nuestro jefe. Tenemos que admitirnos a nosotros mismos nuestra derrota y buscar ayuda porque eso es lo que necesitamos.
SA no es ni una terapia de sexo ni una terapia de grupo. Son los miembros los que dirigen la reunión recurriendo a los modelos de reuniones de que disponemos. No hay profesionales a cargo de las reuniones de SA.
SA es un programa de recuperación de la lujuria y la adicción al sexo basado en los principios de Alcohólicos Anónimos.
Sean cuales sean los problemas con los que llegamos a SA, disponemos de una solución común—la práctica con otros sexólicos de los Doce Pasos y las Doce Tradiciones de la recuperación cuyo fundamento es la sobriedad sexual—.
SA no es un programa religioso, sino un programa espiritual. Habla de un “Poder Superior” y de “Dios tal como nosotros lo entendemos”, pero no se exige ningún tipo de creencia en Dios para ser miembro; los ateos y los agnósticos conocerán otras personas como ellos en este programa de recuperación de Doce Pasos. Tampoco es un problema ser creyente, de cualquier religión o credo. Entre nosotros hay ateos, agnósticos, cristianos, judios, musulmanes, etc.
SA no es un programa de autoayuda. Hasta ahora no habíamos podido salir de la adicción al sexo por nosotros mismos; la recuperación es personal, pero ya no estamos solos. Trabajar los Doce Pasos con la guía de un padrino es el núcleo del programa de SA. Asistir a las reuniones, unirnos a la Fraternidad y seguir las Doce Tradiciones nos da el apoyo necesario en este viaje.
Las reuniones de SA son gratuitas. Para ser miembro de SA no se pagan honorarios ni cuotas. Pasamos una bolsa en las reuniones para pagar el alquiler del local, las publicaciones, el café, etc. Como afirma nuestra Séptima Tradición: “Nos mantenemos con nuestras propias aportaciones.”
Nuestra experiencia colectiva nos enseña que la sobriedad sexual nos libera de la necesidad compulsiva de tener relaciones sexuales. Tratamos de colocar el instinto por la intimidad sexual en el lugar que le corresponde, esto es, para la reproducción y para establecer vínculos sanos con nuestro cónyuge. Cuando renunciamos a la lujuria y a los estímulos sexuales, desaparece la necesidad obsesiva de sexo.
De acuerdo, cometo excesos en mis conductas sexuales, ¿no me bastaría con ser un poco más comedido?
SA es para las personas que han perdido el control en esta parte de sus vidas. Venimos a SA porque no podemos parar, independientemente de cuáles sean nuestras prácticas sexuales adictivas específicas. Hemos perdido la capacidad de parar.
Sí, la sobriedad sexual es posible. Hay miembros sobrios de SA en todo el mundo, tanto casados como solteros. Juntos podemos alcanzar la sobriedad y vivir sobrios en SA si trabajamos el programa día a día.
No existen absolutos en el programa de SA, pero te podemos decir qué es lo que hacemos para alcanzar la sobriedad. Acudimos a las reuniones; trabajamos los Pasos; leemos las publicaciones (de SA y de AA); tenemos padrinos o madrinas a quienes telefoneamos con regularidad. Muchos de nosotros hemos llegado a confiar en un Poder Superior que nos mantiene sobrios.
Aseguramos a todos los que acudan a SA que respetaremos su anonimato.
Cualquier persona que piense que tiene un problema con la lujuria o adicción al sexo puede asistir a las reuniones cerradas de SA y puede considerarse miembro si manifiesta que desea liberarse de la lujuria y alcanzar la sobriedad sexual, según la definición de sobriedad de SA.
No se excluye a nadie, entre nosotros hay personas de todo tipo y condición.
Más allá del sexólico
Informaciones públicas
La Información Pública esta dirigida a adictos o posibles adictos al sexo, psicólogos, psiquiatras, sacerdotes, ministros o líderes religiosos, médicos, asistentes sociales, maestros, profesores, educadores, consejeros matrimoniales, familiares de adictos, y a todos los interesados en saber un poco más sobre la adicción al sexo y la solución que ofrece Sexólicos Anónimos.
Cuando se nos pide colaboración, estamos dispuestos a dar nuestro testimonio de recuperación del sexolismo, en foros, congresos, instituciones, cursos, seminarios, medios de comunicación social, etc. La solicitud se enviará, con al menos tres semanas de antelación a la fecha deseada, al Comité de Información Pública de SA España, que se encargará de atender y coordinar con los grupos locales o por si mismo, la solicitud. Correo de contacto: info.publica@sexolicosanonimos.org
Más Información y próxima sesión de IP
Importante para los Medios de Comunicación Social: por favor contactar previamente para concertar una reunión, con al menos tres semanas de antelación a la fecha deseada, a través del correo: info.publica@sexolicosanonimos.org
A los familiares de adictos
Si has llegado hasta aquí porque conoces a algún adicto al sexo, este es el lugar apropiado. Por propia experiencia, y porque como adictos en recuperación nosotros mismos hemos causado daño a los que nos rodeaban, desde Sexólicos Anónimos conocemos el sufrimiento que las adicciones producen en las personas que nos rodean. Por eso lo primero es indicarte que en España existe un grupo de familiares y amigos de adictos al sexo (S-Anon). Puedes contactar con ellos en la siguiente dirección de correo electrónico, donde te darán más información o puedes también llamar por teléfono. Los Grupos de Familia S-Anon son una hermandad de familiares y amigos de personas adictas al sexo, que comparten sus experiencias, fortaleza, y esperanza, con el fin de encontrarle una solución a su problema común. Este programa de recuperación se adapta sobre los principios de Alcohólicos Anónimos y está basado en Los Doce Pasos y Las Doce Tradiciones. Los Doce Conceptos de Servicio de S-Anon proveen una guía para servirnos mutuamente en nuestros asuntos de trabajos. No existen cuotas para hacerse miembro. Se mantienen por medio de las contribuciones voluntarias de sus propios miembros. S-Anon no está aliado con ninguna secta ni religión, entidad política, organización ni institución; no toma parte en controversias; no apoya ni combate ninguna causa. Su propósito principal es recuperarse de los efectos del sexolismo de otra persona y de ayudar a los familiares y amigos del sexólico. Logran esto aplicando Los Doce Pasos de S-Anon en sus vidas y dando la bienvenida y ofreciendo consuelo a los familiares de los sexólicos.
Estos son los contactos de S-Anon España:
Teléfono: 648 426 116
Correo: info@sanonespana.es
A los profesionales
SA es una fraternidad de hombres y mujeres que se ayudan mutuamente para recuperarse de la adicción al sexo, a la lujuria y/o a las relaciones de pareja. Sexólicos Anónimos la fundaron personas a las que el programa de los Doce Pasos procedente de Alcohólicos Anónimos les sirvió de instrumento de recuperación cuando todo lo demás les había fallado. El propósito primordial de cada grupo es que sus miembros se mantengan sexualmente sobrios y ayudar a otros sexólicos a alcanzar la sobriedad sexual.
SA no trata los aspectos médicos asociados derivados del comportamiento de los adictos, sino la naturaleza compulsiva de la adicción y de las causas profundas que lo causan. Nuestra meta es abstenernos de consumir nuestra droga un día a la vez. Los miembros de SA no son expertos en sexualidad ni en trastornos psicológicos y por lo tanto no competimos con los profesionales del tema.
Las reuniones
Una parte muy importante del programa son las reuniones que organizan de forma autónoma los grupos de SA. La mayoría de las reuniones están abiertas sólo a aquéllos que tienen este problema y quieren dar una oportunidad a la solución que SA propone. El único requisito para ser miembro es el deseo de liberarse de la lujuria y de alcanzar la sobriedad sexual.
El anonimato
Lo que se dice tanto en las reuniones como en las conversaciones particulares entre los miembros es confidencial. A los miembros les preocupa mucho el anonimato debido a lo delicado que es ser adicto al sexo. Hablamos de nuestro programa de recuperación pero no mencionamos los nombres de las personas que están en él.
SA y el sexolismo
Existe todavía una gran controversia sobre qué es lo que constituye la naturaleza de la adicción al sexo. Muchos profesionales sostienen que no existe y otros temen que el calificativo de adicción pueda confundir o perjudicar a sus clientes. Parece ser que las investigaciones recientes indican que el concepto de adicción está evolucionando.
Hablamos de lo que nos enseña nuestra experiencia en la recuperación. En muchos aspectos nos identificamos enormemente con los alcohólicos y drogadictos. Esto significa que en nuestras actividades sexuales o cuando estamos bajo la influencia de la lujuria experimentamos un cambio de personalidad que nos lleva a seguir practicando conductas dañinas o peligrosas a pesar de las consecuencias negativas que nos acarrean. Es por eso por lo que nos llamamos “borrachos del sexo” o “sexólicos”. Al igual que los alcohólicos, que son impotentes ante el alcohol, nosotros no podemos parar una vez que entramos en contacto con la lujuria. La lujuria, para nosotros, puede incluir cualquier tipo de conducta sexual. La lujuria también puede consistir en un estado mental en el que la fantasía desplaza nuestro sentido de la realidad y en el cual un intenso deseo nos obliga a modelar el mundo de acuerdo con nuestros propios deseos internos.
Algunas de las características más comunes de los sexólicos, tanto hombres como mujeres, son: el aislamiento, la depresión, la culpa y un sentimiento profundo de vacío. Entre nuestras conductas más comunes figuran las fantasías sobre el sexo y otros deseos egocéntricos, las relaciones de codependencia perjudiciales, la masturbación compulsiva, el uso de pornografía, Internet incluida, las relaciones sexuales promiscuas, el adulterio, las conductas exhibicionistas, los abusos sexuales sin tener en cuenta las consecuencias legales.
Nuestra experiencia nos dice que no podemos recuperarnos de verdad si no nos reunimos con otros sexólicos y si no aceptamos su ayuda. Que debemos primero interrumpir nuestras prácticas sexuales adictivas en todas y cada una de sus formas y buscar una solución espiritual para nuestro problema. Que debemos examinar con minuciosidad nuestro carácter e ir cambiando, de forma progresiva, esos patrones de conducta que nos obligan a recurrir a las fantasías y a las conductas sexuales perjudiciales antes que nada. Nuestro objetivo es curarnos de toda una vida de pensamientos y conductas que no podemos calificar de sanos. Nuestra experiencia nos enseña que la participación en el programa de Sexólicos Anónimos puede ser un buen complemento al trabajo que usted desarrolla con sus clientes que sufren compulsiones sexuales.
Lo que algunos profesionales han descubierto
Naturalmente puede haber cierto escepticismo en cuanto a la necesidad, o a la viabilidad de un programa de recuperación de adicción al sexo. Sin embargo, cada vez es mayor el número de psicoterapeutas, clérigos, médicos, profesionales de la salud, y personas que ayudan a los sexólicos que descubren que este tipo de programas ofrece a sus clientes una ayuda y un apoyo único que sólo un programa basado en los doce pasos puede proporcionar.
El transmitir nuestra experiencia a los que son como nosotros constituye el beneficio singular que nos proporciona el programa de Sexólicos Anónimos.
Algunas objeciones muy comunes a SA
¿Qué quiere decir eso de tener una adicción?
Con independencia de que se califique de problema, desorden compulsivo o adicción, los efectos destructivos que tiene siguen siendo los mismos. En el programa de Sexólicos Anónimos no nos dedicamos a analizar la causa de nuestras conductas o de nuestras actitudes. Nos centramos en las soluciones a las conductas que nos causan problemas.
“Es demasiado religioso”
SA no es un programa religioso, sino un programa espiritual. Habla de un “Poder Superior” y de “Dios tal como nosotros lo entendemos”, pero no se exige ningún tipo de creencia en Dios para ser miembro; los ateos y los agnósticos conocerán otras personas como ellos en este y en otros programas de recuperación de doce pasos.
“No quiero que se me asocie a gente enferma como esa. Tengo que tener cuidado con mi reputación”
Los miembros de SA proceden de todos los ambientes, desde el más lujoso al más pobre. Aunque nuestras conductas adictivas puedan diferir, la ingobernabilidad y los efectos negativos, que siempre van a más, se producen en múltiples áreas de nuestras vidas (personal, familiar, conyugal, legal, financiera, profesional y espiritual) y son devastadores.
“Si tengo que hablar de este problema con otras personas, preferiría morirme”
Hablar en las reuniones de SA no es obligatorio. Los secretos y el aislamiento lo único que hacen es perpetuar y agravar nuestros problemas. “El abrir brecha con nuestras debilidades” nos mantiene en el camino de la recuperación.
La primera reunión de SA
Cuando los profesionales recomienden SA a sus pacientes, es conveniente que les propongan asistir al menos a seis reuniones.
Sugerimos a los recién llegados que se identifiquen por sus nombres, sin mencionar los apellidos, ante los demás al comienzo de la reunión. En las reuniones, los miembros transmiten su experiencia, fortaleza y esperanza. El trato con los miembros antes, después y entre las reuniones es una parte importante de nuestra recuperación.
Recomendamos al recién llegado que le pida a algún miembro que le apadrine temporalmente. La mayoría vienen cargados de preguntas. El padrino o la madrina podrán responderlas y explicarle que otros han tenido las mismas dudas y miedos a la hora de dar el primer paso hacia su recuperación.
Resumen
Como miembros de SA, trabajamos el programa de SA por motivos muy prácticos: porque nos funciona. Esperamos poder ser útiles al profesional de la salud y a todos aquellos que ayudan a los sexólicos.
Si deseas contactar con nosotros envíanos un correo a info@sexolicosanonimos.org o usa el formulario que encontrarás aquí